Que mejor para mí que hablar de empresas y sus trayectorias a lo largo de los años. Pues bueno ésta columna hablará de una en particular, singular no solo por el tiempo de vida que lleva, el reconocimiento mundial que posee, y los miles de “socios” que la conforman si no también por estar siempre en todos los debates sociales, tanto nacionales como internacionales.
Si bien el objetivo de la Iglesia Católica se basa en algo así como “difundir y proclamar la palabra de Jesús” y lo ha cumplido de manera ininterrumpida a lo largo del tiempo, hoy en día se encuentra en crisis!. Y no me refiero a una crisis económica como la que estamos acostumbrados a escuchar en noticieros y diarios, si no mas bien a una “crisis de obediencia”.
Si alguien me volviese a decir que ésta entidad es un medio de manipulación de masas y control de mentes, tal como alguna vez oí algo semejante de una amistad cercana, esta vez me reiría en su cara y volvería a pensar lo mismo (típica persona ignorante que intenta poner un debate sobre la mesa en donde al parecer no se ha actualizado acerca de éste).
Jamás negaré la participación y expresión de opiniones que hace continuamente el Vaticano en temas políticas y sociales que ocurren a nivel mundial y en cada nación, y es así como debe de ser. La Iglesia Católica debe manifestar su opinión en temas contingentes y velar por el cumplimento de actos que se enmarquen dentro de las directrices cristianas, pero es aquí donde se origina el conflicto que da origen a la crisis que menciono. ¿Que pasa con temas como la eutanasia y el aborto?, Claramente la iglesia ha manifestado su opinión, la cual va acorde a sus creencias y lo establecido en los mandamientos, pero el primer problema se origina en que sus propuestas si bien son escuchadas y consideradas al momento de tomar las decisiones , éstas son consideradas solamente como opiniones y en mucho de los casos no se llevan a la práctica.
Recordemos por ejemplo el caso de eutanasia que se vivió en Italia pocas semanas atrás, donde la joven Eluana Englaro fue desconectada de los instrumentos médicos que la mantuvieron viva por más de 16 años, esto a causa de la solicitud de su padre a la justicia italiana solicitando que fuese desconectada para así acabar con el sufrimiento. Sumado a eso también esta el caso de aborto, que al igual que antes, la justicia brasileña dictaminó realizar a una pequeña de 9 años la cual fue violada por su padrastro, ello debido a que si continuaba en su estado de embarazo su vida correría peligro.
Con esta columna no pretendo justificar los actos que se llevaron a cabo, si no mas bien mi intención es demostrar la actual situación en que se encuentra esta ancestral empresa. Una posición complicada donde claramente no puede apoyar decisiones que vayan en contra de sus creencias, pero tampoco debiese proponer soluciones que si bien se enmarcan dentro de sus mandamientos y filosofías de vida, no consideran la situación del caso, la evolución de la sociedad ni los mas de 2000 años que existen desde sus inicios hasta la fecha actual.
Está la Iglesia Católica entre la espada y la pared?, si es así, que solución existe?.
Tál como lo ha venido proclamando hace tiempo el vaticano, y como se puede corroborar a través de las tendencias de nuestra sociedad, las personas cada día se encuentran más alejadas de la influencia católica, especialmente las nuevas generaciones, manifestándose esto a través de una disminución en las cifras de matrimonios religiosos, bautismo en el caso de infantes, etc. Y año a año como solución a ello la iglesia propone medidas para acercarse a la comunidad y hacerse más partícipe en el diario vivir de las personas.
Es aquí donde se presenta el segundo problema, ¿Si bien la iglesia intenta acercarse a la comunidad, no se contradice esto con sus opiniones referente a eutanasia, aborto y homosexualidad, entre otros?.
Dichos temas si bien son inherentes a cualquier sociedad de hoy en día, aun no se encuentra solución como afrontarlos y a mi parecer la iglesia católica debe actualizar sus discursos y acercarlos más a las realidades que se viven hoy en día, obviamente sin dejar de lado sus creencias, las cuales creo que si bien hay que respetar no son aplicables a todas las situaciones.
Si bien el objetivo de la Iglesia Católica se basa en algo así como “difundir y proclamar la palabra de Jesús” y lo ha cumplido de manera ininterrumpida a lo largo del tiempo, hoy en día se encuentra en crisis!. Y no me refiero a una crisis económica como la que estamos acostumbrados a escuchar en noticieros y diarios, si no mas bien a una “crisis de obediencia”.
Si alguien me volviese a decir que ésta entidad es un medio de manipulación de masas y control de mentes, tal como alguna vez oí algo semejante de una amistad cercana, esta vez me reiría en su cara y volvería a pensar lo mismo (típica persona ignorante que intenta poner un debate sobre la mesa en donde al parecer no se ha actualizado acerca de éste).
Jamás negaré la participación y expresión de opiniones que hace continuamente el Vaticano en temas políticas y sociales que ocurren a nivel mundial y en cada nación, y es así como debe de ser. La Iglesia Católica debe manifestar su opinión en temas contingentes y velar por el cumplimento de actos que se enmarquen dentro de las directrices cristianas, pero es aquí donde se origina el conflicto que da origen a la crisis que menciono. ¿Que pasa con temas como la eutanasia y el aborto?, Claramente la iglesia ha manifestado su opinión, la cual va acorde a sus creencias y lo establecido en los mandamientos, pero el primer problema se origina en que sus propuestas si bien son escuchadas y consideradas al momento de tomar las decisiones , éstas son consideradas solamente como opiniones y en mucho de los casos no se llevan a la práctica.
Recordemos por ejemplo el caso de eutanasia que se vivió en Italia pocas semanas atrás, donde la joven Eluana Englaro fue desconectada de los instrumentos médicos que la mantuvieron viva por más de 16 años, esto a causa de la solicitud de su padre a la justicia italiana solicitando que fuese desconectada para así acabar con el sufrimiento. Sumado a eso también esta el caso de aborto, que al igual que antes, la justicia brasileña dictaminó realizar a una pequeña de 9 años la cual fue violada por su padrastro, ello debido a que si continuaba en su estado de embarazo su vida correría peligro.
Con esta columna no pretendo justificar los actos que se llevaron a cabo, si no mas bien mi intención es demostrar la actual situación en que se encuentra esta ancestral empresa. Una posición complicada donde claramente no puede apoyar decisiones que vayan en contra de sus creencias, pero tampoco debiese proponer soluciones que si bien se enmarcan dentro de sus mandamientos y filosofías de vida, no consideran la situación del caso, la evolución de la sociedad ni los mas de 2000 años que existen desde sus inicios hasta la fecha actual.
Está la Iglesia Católica entre la espada y la pared?, si es así, que solución existe?.
Tál como lo ha venido proclamando hace tiempo el vaticano, y como se puede corroborar a través de las tendencias de nuestra sociedad, las personas cada día se encuentran más alejadas de la influencia católica, especialmente las nuevas generaciones, manifestándose esto a través de una disminución en las cifras de matrimonios religiosos, bautismo en el caso de infantes, etc. Y año a año como solución a ello la iglesia propone medidas para acercarse a la comunidad y hacerse más partícipe en el diario vivir de las personas.
Es aquí donde se presenta el segundo problema, ¿Si bien la iglesia intenta acercarse a la comunidad, no se contradice esto con sus opiniones referente a eutanasia, aborto y homosexualidad, entre otros?.
Dichos temas si bien son inherentes a cualquier sociedad de hoy en día, aun no se encuentra solución como afrontarlos y a mi parecer la iglesia católica debe actualizar sus discursos y acercarlos más a las realidades que se viven hoy en día, obviamente sin dejar de lado sus creencias, las cuales creo que si bien hay que respetar no son aplicables a todas las situaciones.
Atentamente
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